3D A LA MODA

La moda va a adoptando todo tipo de tecnología para entusiasmar a los usuarios. En los últimos tiempos comenzó a experimentar con la impresión 3D.

 

Son muchos los diseñadores que han realizado creaciones en 3D que podrían utilizarse fácilmente por cualquier persona.


La impresión 3d en la moda se ha venido desarrollando desde hace algunos años, sobre todo en las pasarelas y en la alta costura; su aplicación todavía no se ha popularizado a la ropa de uso diario, pero seguramente faltará poco para verlos las calles.
Las aplicaciones de la impresión 3d van desde prótesis quirúrgicas o implantes, juguetes, viviendas, prototipos para industrias como la automotriz, la salud, la educación y, por supuesto, la moda y la ropa. Definitivamente, la impresión 3D tiene muchísimas aplicaciones y ya está incorporada a la vida diaria.
Dependiendo de la tecnología utilizada se pueden catalogar las impresoras 3D en grupos diferentes.
Las impresoras por Estereolitografía (SLA) son las más antiguas, consisten en aplicar luz ultravioleta sobre una resina líquida que sensible que va solidificando. Con este método se generan resultados de muy alta calidad, pero se desperdicia material.
La de Sinterización Selectiva por Láser (SLS) que utiliza materiales en polvo que se solidifican con el láser. Las de inyección que es la más parecida a la impresión tradicional, pero en vez de tinta, inyectan capas de fotopolímero líquido. Las de deposición de material fundido (FDM), que son las más comunes y consisten en agregar un polímero fundido sobre una base plana, capa por capa.

 

 

Ahora, la moda en 3D ha comenzado a mostrar resultados. Se han ensamblado vestidos, zapatos, corbatas, accesorios complejos y originales, con diseños creativos e innovadores. Existen dos vertientes en este mundo: la impresión de prendas flexibles y de prendas rígidas. Las prendas flexibles buscan la elaboración de mallas en materiales flexibles como Filaflex, que aportan elasticidad permitiendo adaptarse a las formas y movimientos del ser humano.
Las prendas rígidas parten de una estructura geométrica, permitiendo materializar diseños de gran complejidad y detalle; en la actualidad, básicamente se están utilizando prendas rígidas para desfiles de alta costura. Dentro de los accesorios, se pueden destacar anteojos, correas, bolsos, joyería y bijouterie personalizados.
La impresión 3D evita el desperdicio porque solo utiliza el material necesario, y tiene gran ventaja para la creación de ropa, moda y accesorios personalizados y totalmente creativos.
Son muchos los diseñadores que han realizado creaciones en 3D que podrían utilizarse fácilmente por cualquier persona, pero muchos otros se niegan a creer que realmente la impresión 3D y moda tengan futuro en el día a día y cotidianidad de las personas.
Esto es porque es más barato crear una prenda de vestir en tela que utilizar una impresora 3d; la creación de una pieza de vestir en una impresora 3D es muy lenta, puede tardar muchas según la complejidad del diseño.
Los materiales utilizados no se parecen tanto a la tela y su textura, lo que para algunos, limita la caída de la ropa y su apreciación al tacto. Por la razón anterior, la ropa impresa en 3D podría no ser tan cómoda como la que utilizamos día a día.