MÁSCARAS DE FABRICACIÓN NACIONAL

Ante el contexto actual, Proyecto Color adaptó su operatoria con la realización de viseras para armar máscaras de protección.

Como una manera de adaptarse al momento, y a fin de no dejar de producir y dar continuidad laboral a sus empleados, Proyecto Color, a través de su división Global Solution Technology 3D (GST 3D) está en marcha con un proyecto que ayuda a la prevención general de toda la población.
“Hace cinco meses comenzamos la fabricación de filamentos de ácido poliláctico (PLA) a través de impresoras 3D. Debido a la situación de la pandemia, nuestros clientes empezaron a analizar qué cosas podían imprimir. Así surgió la idea de hacer viseras para armar máscaras de protección de ojos, nariz y boca”, comentó Walter Di María, gerente general de Proyecto Color, a Info Sign & Design Shop.
“Todo empezó con el hobby de una persona. Se corrió la información por las redes sociales y medios de comunicación. Después nos dimos cuenta que quienes nos compraban el filamento no tenían el PVC para poner la máscara”, comentó Di María, y agregó: “Como contamos con una máquina para encuadernación, logramos modificarla para hacer la lámina de PVC o de PET, que es lo que protege la cara”.
Proyecto Color comenzó con cinco personas que, a través de un permiso habilitante, entregaban las máscaras a hospitales y clínicas. “Una vez que el Presidente alargó la cuarentena, nos habilitaron a trabajar normalmente. Aprovechamos la situación para sumar 25 empleados en el empaquetado de los productos y entregarlos a todo el país”.
La venta se realiza a través de la página web de la empresa y de Mercado Libre. El envío por un sistema de logística, que puede ser Mercado Envío o bien por un sistema de reparto. Al respecto, Di María destacó que “la demanda está superando lo que podemos vender”.
Por otra parte, comentó que este emprendimiento permite a Proyecto Color adaptarse a los límites que impone COVID-19 y que también sirve para ayudar en la prevención general de la población.
“Lo importante también es la fabricación nacional del producto. Ya habíamos hecho la inversión en la Argentina. En un momento como el actual, donde las importaciones están trabadas, podemos desarrollar el producto en el país, que es muy aceptado en el mercado y de muy buena calidad. Rivaliza con los de origen chino y a valores más competitivos”, enfatizó el empresario.
En edificio en donde está ubicado Proyecto Color operan 80 empleados. En su amplia extensión, cada uno trabaja a dos metros de distancia y sólo concurren 25 personas por turno.